1. UNA CAJA
Puedes gastar euros y euros en juguetes súper bonitos y caros que a la hora de la verdad, lo que realmente le gusta a un gato es una caja. Jugarán con ella, dormirán dentro, harán agujeros para controlarlo todo y la morderán para adornar tu salón con trocitos de cartón. A los gatos les encantan las cajas y cuanto más grandes mejor. 
¿Has oído eso de que si hay caja hay gato? Dame una caja y moveré el mundo pensarán ellos.
2. ALTURAS
Los gatos son unos gimnastas natos. Mientras tu te dejaste los dientes saltando un muro que te llegaba por la rodilla, los gatos pueden llegar a saltar dos metros. Desde lo alto de un armario o un mueble del salón podrán vigilar todos tus movimientos, controlarán todo lo que pasa y además se sentirán seguros.
En invierno, además, los lugares altos también son los más calentitos porque el calor de la calefacción sube hacia arriba.
3. LATITAS
¿Tu gato te grita como si no hubiese comido en días cuando llega la hora de la latita? ¡Qué vergüenza como te oigan los vecinos! Con semejantes gritos van a pensar que el animal lleva días sin comer.
4. MIRAR POR LA VENTANA
No hay ventana sin gato. Desde la seguridad de una reja los gatos pasan horas y horas contemplando el mundo.
Los olores, pajaritos, la gente que pasa y así entre unos que van y otros que vienen se pasan los minutos. Hay que tener mucho cuidado con las ventanas y los balcones abiertos, pon barreras en aquellos lugares que consideres que pueden ser peligrosos.
5. DESPERTARTE
Pero no te despiertan un lunes o un martes, bueno sí, si no te ha sonado la alarma son unos estupendos despertadores. Los gatos se toman al pie de la letra eso de que ‘a quien madruga Dios le ayuda’ porque madrugan hasta los domingos. Con un poco de suerte y si han tenido noche de parranda parrandera no te despertarán antes de las siete de la mañana, de lo contrario… Resignación.
6. DORMIR
Si a los gatos les encanta despertarte los domingos a las siete, a las siete y cuarto están durmiendo a tu lado mientras tu tomas el café con los ojos medio cerrados aún. Los gatos pasan el 70% del día entre cabezada y cabezada.
¿POR QUÉ LOS GATOS DUERMEN TANTO?
No es que sean vagos es que está en su naturaleza. Desgastan menos energía y regulan la temperatura de su cuerpo y en invierno duermen más porque se mantienen calentitos. Si pasan muchas horas solos en casa también dormirán más porque se aburren. Los gatos esterilizados también son más dormilones.

7.MIMOS EN LA CABEZA
Es tocarles la cabeza y debajo de la barbilla y empezar a ronronear. De cuello para arriba es el lugar ideal para darle mimos.